BAMBOLEOS DE MAR GRUESA

A uno le justifica pensar que los marinos del pasado fueron verdaderos lobos de mar.

Ahora pienso, que Portugal está un poco lejos, Y lo mejor también acabo justificando que me pareció por ello la gran desconocida, lo sabremos en su momento.

Hace unos días acabé de leer la hermosa historia de José Saramago, sobre el Viaje del Elefante. Aquel que regalo, Carlos IV, Rey de Portugal a los Duques de Austria, y que viajó desde Portugal a Valladolid por los campos, de España, y desde ahí hasta la fría Austria recorriendo media Europa a través de los Alpes. Fue un hermoso regalo y una gran aventura la que departió aquella expedición. Algo a lo que tan solo se atrevió el gran Aníbal cuando creó el ejército de paquidermos para impresionar a la vieja Europa.

Lo cierto es que el ser humano se ha pasado la vida, intentando justificar viajes, y aventuras. La que nos compete, se gestó a mediados del pasado año cuando la segunda visita a Madeira. Sentimos la necesidad de seguir abriendo fronteras, al fin y al cabo tenemos los medios, desde aquel entonces estamos resueltos a cumplir otro objetivo, y como todos los retos que nos hemos trazado en la vida, nos late el corazón y agudiza la expectativa.

Confieso antes de descubrir las tierras lusas, que me llama la atención conocer tan poco de este cercano vecino de España. Tal vez, atrapado en la misma cercanía hemos omitido la visita, como cuando uno piensa que por vivir al lado, siempre habrá un hueco para intentarlo. Tampoco parece justo. Pero en este caso no hablamos de justicia, si no de oportunidad, que parece que ya se prodiga, intentamos pues la nueva aventura

No sé en que parte del Atlántico estamos, cierto es que en la madrugada de esta nave, la mar gruesa intenta mecer la noche, Entre bamboleos de resignación para algunos, de espera para otros, anoche al menos José A. me facilitaba los datos con la información que le extraía al GPS, estamos a 620 kilómetros de Portugal, navegamos a tantos nudos, el estado de la mar. No amigo¡ el estado de la mar, ya lo siento. Para eso no necesito el GPS. Y aún teniendo tanta información seguimos esperando llegar a tierra, cuando amanezca mañana, Si dios quiere.

Juan Fra lleva la peor parte, debió de haber tenido una mala experiencia en la otra vida, pues no puede dominar el mareo. Cuco lleva la mejor, su participación en todos los terrenos de aventuras, le han consolidado en la espera y las condiciones. Desde la salida de Gran Canaria, hemos conocido a Neno, un motero italiano que vuelve a casa por carretera, Y que nos gratifica su compañía y rodaje.

Trataba de contarles algo, poco más vemos en la distancia de momento, cuando llegamos a puerto previsto para varias horas, Nos tomaremos la primera etapa, de relax, descubriremos el sur de estas tierras y a lo mejor encontramos las razones por las que hemos venido, cada cosa a su tiempo y en su tiempo.

Quiero enviar un cálido abrazo a los lectores del blogs, a un montón de amigos que nos siguen con la misma expectación que le narramos, esperamos poder trasmitirle, las vivencias y experiencias de una nueva cita con la historia de moto turismo Internacional desde Canarias.

Buenos días España, Buenos días Canarias.